Star Wars: El Juego de Cartas
Es una época oscura para la galaxia. El Imperio Galáctico ha consolidado su dominio a través del poderío de la Armada Imperial. En el submundo de los planetas más poblados del Imperio, y en las fortalezas a lo largo del Borde Exterior, poderosos gángsteres gobiernan vastas organizaciones criminales. Desde las sombras, aquellos que se han perdido en el lado oscuro de la Fuerza planean llevar sus malvados designios a una galaxia ya oprimida.
Sin embargo, no toda la esperanza está perdida. La Alianza Rebelde resiste el férreo control del Imperio. Los contrabandistas y otros elementos marginales prestan su ayuda a la rebelión. Y desconocidos para el Emperador y sus oscuros secuaces de los Sith, los últimos restos de la noble Orden Jedi trabajan incansablemente para restaurar la paz y el orden en la galaxia.
Star Wars: El Juego de Cartas es un juego de cartas para dos jugadores que pone a un jugador al mando de los Rebeldes (lado claro, con las facciones Jedi, Alianza Rebelde, y Contrabandistas y Espías), y a un jugador al mando del Imperio (lado oscuro, con las facciones Sith, Armada Imperial, y Escoria y Villanía). La expansión del Balance de la Fuerza permite juegos multijugador. El juego está ambientado en el marco temporal de la trilogía original de Star Wars.
Cada jugador tiene un mazo de cartas objetivas que representan varias misiones, además de un mazo de cartas de unidades (personajes, vehículos, droides y criaturas), eventos, mejoras y destinos. Cada objetivo está vinculado a un conjunto de cinco cartas de jugador. La construcción de la baraja consiste en elegir qué objetivos van a ir en tu mazo de objetivos, y luego añadir cada uno de esos objetivos del conjunto de cinco cartas de jugador a tu mazo de jugador. El juego consiste en desplegar cartas en tu tablero, atacar los objetivos de tu oponente, defender tus propios objetivos, y comprometer las cartas en la lucha de la fuerza.
El Imperio gana si el dial de la Estrella de la Muerte llega a 12, con este dial aumentando en uno en cada turno del lado oscuro, poniendo efectivamente un temporizador en el juego. También se puede aumentar ganando la lucha de fuerzas, destruyendo los objetivos del lado de la luz y mediante efectos de cartas. Los Rebeldes ganan destruyendo tres objetivos del lado oscuro antes de que el Imperio gane.