Considerado por muchos como la obra maestra de Reiner Knizia, este juego de mesa está ambientado en las fértiles tierras que sirvieron de cuna a la civilización.
Los jugadores deben colocar sus piezas en el tablero de forma que su civilización prospere en cuatro ámbitos: agricultura, comercio, religión y gobierno.
Los líderes de cada facción se usan para recoger puntos de victoria, pero como es natural surgirán conflictos entre las diferentes civilizaciones al encontrarse sobre el terreno.